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Inteligencia trabaja para atraparlos

Tras la baja de los cabecillas, el narcotráfico tiene nuevos jefes en el país

Operativos Ejército Nacional y otras Fuerzas Militares colombianas habrían dejado vía libre al nuevo surgimiento de de cabecillas de diferentes grupos armados.

Riñas internas, operativos de las Fuerza Militares en Colombia y disputas por territorios en varios puntos de la geografía nacional han dejado sin cabecillas a las diferentes organizaciones delictivas e ilícitas en el país. Por ello, las agencias de inteligencia en el país cruzan información con el fin de establecer quiénes ocuparan esos puestos como líderes de los grupos delictivos y narcotraficantes de base de coca.

En un dossier de estructuras delincuenciales se pudo constatar qué está sucediendo en cuanto a liderazgo de los grupos delictivos principales en el territorio nacional. Por ejemplo, cuando el presidente saliente Iván Duque, se posesionó en este cargo hace cuatro años, las principales estructuras delincuenciales eran Los Puntilleros, Los Caparros y Los Pelusos, pero gracias al accionar de las fuerzas de orden público salieron del panorama y se redujeron a pequeños grupos.

Ahora, la radiografía del conflicto armado auspiciado por grupos delictivos es diferente. Está encabezada por el Eln, las disidencias de las Farc y el Clan del Golfo’, que juntas sumarían aproximadamente 11.500 personas entre redes de apoyo.

Ante las diferentes operaciones que ha adelantado las Fuerzas Militares, hay una reducción de 1.500 hombres, la captura de 300 narcotraficantes, entre ellos alias Otoniel, quien fue extraditado hace unos meses a Estados Unidos. El mismo dossier detalla las bajas de aproximadamente 200 integrantes de estas estructuras delictivas en Colombia.

El legado de las organizaciones delictivas en Colombia

Por cada uno de los anteriormente mencionados, el Gobierno Nacional ofrece cerca de cinco mil millones por información que permita la captura de alguno de estos cabecillas.

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