Según el Gobierno, el Fonigualdad estaba destinado para el naciente Ministerio de la Igualdad. Habían dicho que este se utilizaría para garantizar los recursos para las mujeres y poblaciones rurales. Pero los que votaron para hundirlo, dijeron que no estaba claro a qué se iban a destinar los recursos.

Por ahora, continúa en firme que el presidente pueda expedir normas con fuerzas de ley que entren a modificar los programas Familias y Jóvenes en Acción para incluirlos en el sistema de transferencias. También el que le permite al mandatario comprar el Hospital San Juan de Dios en Bogotá para abrirlo como una Institución Prestadora de Salud.

El interés de Gustavo Petro por este hospital no es nuevo, cuando era alcalde de Bogotá la capital lo adquirió. Sin embargo, ha sido crítico con las decisiones que tomaron sus sucesores Enrique Peñalosa y Claudia López. De pasar los siguientes debates, la nación adquiriría el San Juan de Dios “a título o gratuito”.

También pasó el artículo con el que el presidente Gustavo Petro podrá expedir un decreto con fuerza de ley que cree una entidad alterna al Invías. Esta sería dependiente al Ministerio de Transporte y su misión sería hacerse cargo de la infraestructura de las vías terciarias del país.

Continúa en firme que el Gobierno nacional pueda modificar algunos puntos del llamado Grupo Bicentenario, el holding financiero estatal con el que quieren impulsar la llamada economía popular. Por último, también pasó el artículo que da facultades extraordinarias hasta por un término de seis meses para dar desarrollo al servicio nacional forestal.

Lo que no pasó en el Plan Nacional de Desarrollo

Las derrotas del Gobierno estuvieron en el artículo con el que el presidente buscaba poder crear un holding para el sector eléctrico, integrando a las empresas detrás de las principales centrales eléctricas del país. Tampoco pasó el artículo con el que se proponía darle facultades extraordinarias al mandatario para expedir un decreto con fuerza de ley que regule las condiciones especiales de reclusión de los miembros de pueblos y comunidades indígenas.

También se cayó la creación de la Agencia Nacional de Seguridad Digital y Asuntos Espaciales que, según los proponentes, buscaba proteger al país de ataques cibernéticos. Sin embargo, opositores, como Miguel Uribe, aseguraron que lo que se buscaba era crear una entidad que tuviera facultades para “chuzar a la oposición”.

La Agencia Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación que buscaba ser la responsable de “fortalecer la financiación y ejecutar la política de ciencia, tecnología e innovación a través de mecanismos, programas, proyectos” tampoco tuvo un paso exitoso en el legislativo y se hundió.

El último artículo que no pasó fue el que le permitía al Gobierno Nacional fusionar, modificar o liquidar los fondos cuenta con o sin personería jurídica o los patrimonios autónomos administrados por órganos o entidades del Presupuesto General.