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Los jóvenes no ven futuro

Panorama complejo: ¿seguirá el estallido social en Cali?

Marcha masiva de jóvenes en medio del Paro Nacional.

Este grupo de colombianos son vistos como vándalos por un sector de la opinión pública, en medio de un reclamo generalizado por oportunidades de orden educativo, cultural, y capacitación en todas las áreas del conocimiento.

La ciudad de Cali es Distrito Especial, tras una iniciativa legislativa, que a la luz del panorama social y económico, no ha logrado contener el malestar de los jóvenes.

En palabras del Alcalde Jorge Iván Ospina, la gobernabilidad está en cero, en medio de puntos de resistencia, en el oriente de la ciudad.

Todos los sectores de la sociedad vallecaucana, coincide que los jóvenes de Cali, no tienen alternativas y posibilidades de empleo, tras más de 40 días de Paro Nacional.

Desde el punto de vista geográfico, esta zona del país, la frontera agrícola está en caña en un 25 por ciento. "En el Valle del Cauca existen 3 ingenios azucareros. El sector genera 280.000 empleos".

Cansados de la indiferencia del sector público y privado, los jóvenes no ocultan la incertidumbre por el presente y futuro. "Hasta las paredes alzan su voz".

"Debemos comenzar a escucharnos. Escucharnos desde el cambio, en medio de la intimidación y el miedo", añaden.

Los jóvenes en las comunas aledañas de Cali, no pueden acceder a los recursos del Estado y es casi imposible llegar a la educación superior. "Día tras día es una lucha para estudiar", insisten.

Un millón de personas están viviendo en la pobreza. "Está muy lejos de ser la sucursal del cielo".

La calle 5 -lugar emblemático de la capital del Valle del Cauca- tiene las cicatrices del Paro Nacional. "Muchos lugares están destruidos y locales vacíos".

Todos tenemos una responsabilidad de sacar adelante a la región y a la ciudad de Cali. "A los empresarios nos ha faltado humildad. Ponemos en los zapatos del otro", subrayó Harold Eder.

En palabras de Harold Eder -empresario azucarero- los jóvenes están insatisfechos por la ausencia de las oportunidades. "En las dos últimas semanas los han escuchado a los jóvenes. La empresa privada tiene que tener un propósito", argumenta.

En el diagnóstico, es claro que las empresas deben prepararse para lo que los jóvenes necesitan. "Tiene que existir más emprendimientos.

Mientras Colombia no sea un país desarrollado, estaremos siempre en deuda", anotó.

La sociedad caleña está en crisis. Busca salidas en el terreno público y privado, en medio de un diálogo con los jóvenes, que son actores activos de esta urbe colombiana, dónde "mira ve", hace parte de su historia y su riqueza cultural.

Lo cierto, es que el frenazo de la economía en Cali fue abrupto desde el pasado 28 de abril. "Debe existir unos acuerdos mínimos entre quienes hacen el Paro Nacional y el Gobierno".

Los emprendedores caleños, quieren ser sus propios jefes. Han creado red de distribuidores, a través de modelos de negocio. También en la creación de centros de experiencia.

En medio de la tormenta que se ha hecho visible por el Paro Nacional, las microempresas están en cuidados intensivos. "Se han modificado horarios, en medio de ausencia de materia prima".

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