Culpan al ELN de la pérdida de uno de los balnearios turísticos más importantes del Catatumbo
El rincón de aguas cristalinas, llamado Pozo Azul, que baña las cálidas tierras del municipio de Tibú, al Norte de Santander, agoniza debido a un derrame de crudo provocado a principios de esta semana por guerrilleros del Eln.
El fluido se vertió sobre el río Tibucito, que irriga las cascadas de este balneario natural, considerado el destino preferido de esta población durante Semana Santa.
Un balneario natural del Catatumbo agoniza por atentado del #ELN
— Edwin Ballesteros (@EdwBallesteros) 18 de abril de 2019
Ataque a oleoducto provocó un derrame de crudo que arruinó el lugar de descanso de una comunidad. https://t.co/pFgBdNqYin
Esta infraestructura petrolera, que recorre 328,3 kilómetros de longitud, ha sufrido un total de 14 ofensivas: ocho se han registrado en el departamento de Arauca y seis, en Norte de Santander.
En una sala de crisis, con delegados del Ministerio de Ambiente y la Corporación Autónoma de la Frontera Nororiental, las autoridades analizaron la magnitud del daño y evaluaron el plan de respuesta por parte de Ecopetrol y la Gobernación de Norte de Santander.