Continúa la polémica por multas impuestas a ciudadanos que compren a vendedores ambulantes
Según el Código de Policía, quienes compran a vendedores ambulantes están "promoviendo o facilitando el uso u ocupación del espacio público en violación de las normas y jurisprudencia constitucional vigente".
En Bogotá una empanada puede costar desde $1.000 hasta $4.000, pero un hombre que compró al salir de su trabajo una de estas, en un puesto ambulante, tendrá que pagar $834.000 luego de que varios uniformados lo multaran a él, a tres clientes más y a la vendedora, justificando una infracción al Código de Policía.
La costosa multa ha generado indignación entre muchos ciudadanos, que alegan que existen otras infracciones más graves y delitos mayores en la ciudad.
El escándalo por el comparendo causó el rechazo de muchos. La discusión está entre la defensa del espacio público y el derecho al trabajo. Varios líderes políticos argumentan que el Código de Policía no cabe en un país donde el 60 % del empleo es informal y va más allá.