El senador Robledo señaló que en 2006 Carrasquilla fue autor y tramitó la reforma al artículo 356 de la Constitución, sin la cual era imposible crear los bonos de agua, con los que se empobrecieron a 117 municipios colombianos.

Los bonos fueron amparados en la Ley 1176 de diciembre de 2007, surgiendo el Sistema General de Participaciones que le permitió a los municipios obtener recursos para adelantar obras locales, dado a que muchas poblaciones no podían acceder a créditos para financiar proyectos de acueducto y alcantarillado.

Robledo denunció que para operar los bonos, Carrasquilla intermedió los recursos de unos supuestos inversionistas extranjeros usando a Panamá, paraíso fiscal para el lavado de dinero.

“El ministro Carrasquilla, con esa empresa, lo que hizo fue montar un leonino contra los municipios de Colombia, negocio con el que él y sus socios se ganaron una suma enorme”, aseguró Robledo.

De acuerdo al senador el patrimonio de Carrasquilla pasó de 38 millones (12.544 dólares) en 2009 a 2.242 millones de pesos (739.878 dólares) en 2014.

La firma que asesoró la estructuración financiera de dichos bonos fue Konfigura Capital, una sociedad anónima radicada en Panamá y cuyo propietario es la firma panameña Navemby Investment Group en la que figura Alberto Carrasquilla.

Konfigura Capital, firma que además de asesorar la estructuración de los bonos de agua, asesoró la creación de Bancoomeva, Coomeva EPS, La Equidad Compañía de Seguros y La Casa del Agua.

Aunque en 113 de los 117 municipios afectados en todo el país se construyeron obras, solo en 71 de ellos se terminaron y apenas en 30 municipios eran funcionales. Además, en 49 de los 117 entes donde se ejecutarían los proyectos no se adelantaron procesos de selección que garantizaran la pluralidad de oferentes.

En 2014 el ministerio de Vivienda encontró que las obras de sólo 30 de los más de cien municipios que se embarcaron en el negocio tenían obras funcionales, 41 las tenían terminadas pero no servían, y 46 más no las habían acabado.

Los municipios debían pagar tasas de interés altas frente a otras del mercado y era una deuda a 19 años que no podían prepagar, algo que ver con la estructuración que asesoró Carrasquilla.