La posición del senador Enríquez Rosero se produjo en el marco de un debate donde se pasó al tablero la presencia de los cultivos ilícitos en el sur del país, en medio de la preocupación de sus habitantes, los gremios, la academia, los medios de comunicación e incluso de sectores productivos, que hoy más que nunca, demandan un repensar de la economía de Nariño, frente a los espacios que en materia económica y comercial ha abierto Colombia con el Asia, Europa y Estados Unidos.

“Desde Tumaco pasando por Ricaurte, Ipiales, Cumbal, San Pablo y Pasto entre otros, se requieren la implementación de proyectos donde se aproveche el potencial agrícola de Nariño, donde la costa pacífica juega un papel fundamental. El presente y futuro del departamento pasa por una ambiciosa política del estado de adecuación de tierras, la utilización más eficiente del uso de los suelos, expansión sostenible sostenible de la frontera agrícola, mejoramiento del desarrollo tecnológico, modernización de la comercialización agropecuaria, y la implementación de un sistema de incentivos selectivos que fomente la capitalización del sector rural”, comentó

El senador del Partido de la U Manuel Enríquez Rosero recordó al Ministro de Defensa Luis Carlos Villegas a funcionarios del alto Gobierno que se dieron cita en la Comisiòn Primera, que a lo largo del último año ha recorrido en más de diez oportunidades todos y cada una de las provincias del departamento de Nariño, dialogando con los ciudadanos, con sus autoridades, con los gremios, donde se ha dejado en evidencia que el posconflicto, se construye con un trabajo gerencial de la costa y la sierra, que se nutra de la defensa del medio ambiente , del recurso agua, que beneficien a la población a los campesinos e indígenas.

Es oportuno que el Gobierno fortalezca el Desarrollo Rural del Alto Patía, los sistemas de comercialización y centros de acopio. En el llamado Plan Pacifico, se requiere adecuar los procesos productivos, con capacitación y pedagogía, con el propósito de recuperar sus áreas degradadas. Es hora de darle vida a las microempresas y agrodindustrias pesqueras de esta zona de Colombia”, recalcó Enríquez.

Finalmente, el senador Manuel Enríquez Rosero sentenció “La intervención integral por parte del Estado colombiano en Nariño se hace inaplazable. El Gobierno tiene quiere llegar con respuestas sociales con todas y cada una de las provincias del departamento: La primera tarea, del Gobierno es identificar y los problemas y las soluciones en la prestación de los servicios públicos, mejorar la infraestructura de las vías secundarias y terciarias. Lo que se requiere es edificar una agricultura competitiva que sea capaz de derrotar los cultivos ilícitos”.