Mundo NOVA
Crece la población

Chile se convirtió en receptor neto de inmigrantes

Un fenómeno nuevo para un país geográficamente aislado.

Por José Luis González, de la redacción de NOVA

Desde hace una década, en Chile entra más gente de la que se va. Tras muchos años de inmigración peruana, a esta se han sumado colombianos, ecuatorianos, haitianos, dominicanos, argentinos y europeos.

Es un fenómeno nuevo para un país geográficamente aislado, cuyas últimas inmigraciones masivas tuvieron lugar hasta principios del siglo XX, principalmente desde Europa y Palestina. Al contrario, tras el golpe de Estado de 1973, Chile fue un gran exportador de exiliados y emigrantes económicos.

La llegada de inmigrantes pobres, la presencia en las calles y empresas de afrodescendientes, orientales, acentos diversos, etc., han creado diversas reacciones.

Las trabajadoras domésticas suelen ser peruanas con un refinado conocimiento culinario y un vocabulario amplio, muchas veces superior al de sus empleadores. La sofisticada comida peruana es un boom en el país y la música se ha ido contagiando de ritmos tropicales.

Al mismo tiempo, han surgido fenómenos xenofóbicos, racistas y discriminatorios. La educación chilena ha intentado siempre negar los ancestros africanos de una parte de la población, ha rechazado también a los antepasados indígenas, y se ha centrado en la inmigración europea del siglo XIX e inicios del XX.

Con una cordialidad más o menos aceptable, se podría explorar la relación existente entre chilenos e inmigrantes de distintas categorías sociales (por ejemplo entre un peruano y un español) y la vez cómo los extranjeros ven su situación en Chile.

Para esto habría que tratar de salir de Santiago, pues hay lugares como Antofagasta (1200 km al norte), donde una gran inmigración colombiana ha generado incluso marchas racistas de protesta.

Lectores: 289

Envianos tu comentario